serenidad y de alegre caminar , en la fría caleta Guardiamarina Riquelme

Caleta Riquelme.

Es un día nublado con un frió infernal, con una serenidad que se ve reflejada en la cara de los pescadores de la caleta, entre broma y broma se trabaja sin parar. Algunos están encargados de pintar el bote y otros, de recibir los diferentes tipos de mariscos que llegan al lugar.

La tarde avanza , entre las risas de los pescadores y la brisa marina que se nota entre los que estamos presente en la caleta , como en toda caleta no puede estar ausente , el patrón de los pescadores san pedro y san pablo, cuya imagen es muy querida y cuidada por ellos es orgullo de todo pescador . Esta se encuentra situada a un costado de la entrada cuyo santo es cuidado por las personas que se encuentran de paso por ahí.

Cae la tarde en la caleta, y algunos pescadores hacen abandono del lugar esto quiere decir, que han terminado con sus tareas. Ha finalizado un día más, en la fría y alegre caleta guardiamarina Riquelme, donde las gaviotas se despiden desde los aires de este cálido y tranquilo sitio.

Así es de alegre, tranquila y fría caleta Riquelme, que día tras día, ve como niños, jóvenes, adultos, abuelitos disfrutan encantando de las riquezas y de la paz que siente aquí, que ya mucho quisieran tener. Pero, que pocos saben de sus encantos que está caleta puede entregar a quienes se hacen el tiempo de venir a disfrutar de un momento de tranquilidad y de un alegre caminar por está calidad y fría caleta.